Taumaturgo
Dungeons & Dragons 3.5

El taumaturgo se vale de la energía divina para llegar hasta otros planos de existencia e invocar a seres que allí habitan, con la intención de que le sirvan. Los miembros malignos de esta clase conspiran con demonios y diablos para atesorar poder en el plano Material, mientras que los de alineamiento bueno encomiendan misiones sagradas a ángeles y eladrines de gran poder.

En combate, los taumaturgos suelen convocar seres de los planos Exteriores para que luchen a su lado. Estas criaturas desaparecen tan pronto como finaliza la contienda, pero los taumaturgos también establecen acuerdos con poderosos seres para conseguir su servidumbre durante un periodo extenso. El aliado de los planos de un taumaturgo se dedica en cuerpo y alma a favorecer los objetivos de su amo (o los d euna deidad, si éste adora a una).

Casi todos los miembros de esta clase fueron clérigos en el pasado, porque el primer paso que ha de darse en la senda de la taumagurgia consiste en realizar un pacto con un morador de los planos Exteriores mediante el conjuro aliado menor de los planos. No obstante, la mayor parte de las aptitudes de esta clase resultan de utilidad para los lanzadores de conjuros arcanos, con lo cual, las multiclases de clérigos/magos y algún que otro clérigo/hechicero también están a la orden del día.

Un taumaturgo comprende perfectamente que sus incomparables conjuraciones no son más que herramientas al servicio de la filosofía o fe que profesa. Por ello, suelen emprender misiones para apoyar alguna causa, empleando sus aptitudes para conjurar una fuerza de choque de seres invocados en un abrir y cerrar de ojos.

Dado de Golpe: d4

Habilidades de clase: Artesanía (Int), Averiguar intenciones (Sab), Concentración (Con), Conocimiento de conjuros (Int), Diplomacia (Car), Hablar un idioma (ninguna), Oficio (Sab), Saber (los planos) (Int) y Saber (religión) (Int).
Puntos de habilidad por nivel: 2 + modificador de Inteligencia.

Requisitos

Dotes: Soltura con una escuela de magia (conjuración).
Conjuros: aptitud para ejecutar aliado menor de los planos.

Rasgos de Clase

Competencias con armas y armaduras: los taumaturgos no adquieren ninguna competencia con armas ni armaduras.

Conjuros diarios: cuando adquiere un nuevo nivel de taumaturgo, el personaje obtiene nuevos conjuros diarios como si también hubiera ganado un nivel en una clase lanzadora de conjuros a la que perteneciese antes de adoptar esta clase de prestigio. No obstante, no adquirirá ningún otro beneficio que obtendría esa clase (no consigue dotes metamágicas o de creación de objetos adicionales, ni aptitudes de bardo o asesino, etc.). Básicamente, esto significa que se suma su nivel en la clase de prestigio al nivel que posea en alguna otra clase lanzadora de conjuros a la que perteneciese, a fin de calcular los conjuros diarios, conjuros conocidos y nivel de lanzador.

Si el personaje ha pertenecido a más de una clase lanzadora de conjuros antes de convertirse en taumaturgo, tendrá que decidir a cuál de ellas añade cada nivel de la clase de prestigio, a efectos de calcular los conjuros diarios.

Aliado mejorado: un taumaturgo es experto en convencer a seres de otros planos para que le sirvan. Cada vez que el personaje ejecute el conjuro aliado de los planos (incluidas las versiones menor y mayor), tendrá que realizar una prueba de Diplomacia, a fin de convencer a la criatura para que le ayude a cambio de un pequeño pago. Si la prueba de Diplomacia del taumaturgo logra ajustar la actitud de la criatura para que sea solícita, ésta trabajará por un 50% del pago habitual siempre y cuando la tarea no vaya en contra de su naturaleza. Por ejemplo, un taumaturgo de nivel 1 que esté negociando con un aliado planario cuya actitud inicial sea amistosa y obtenga un resultado de 15 en la prueba de Diplomacia, será capaz de convencer a una criatura de 6 DG para que realice una tarea durante 7 horas por tan solo 1.500 po por hora (normalmente, la criatura exigiría 3.000 po cada hora).

El rasgo de aliado mejorado de esta clase sólo funciona cuando un aliado planario comparte, al menos, uno de los aspectos del alineamiento con el taumaturgo. Un personaje únicamente puede tener un aliado planario a la vez, aunque podrá regatear normalmente con otros acerca de posibles tareas.

Aumentar convocación: en 2º nivel, un taumaturgo adquiere la dote Aumentar convocación.

Prolongar convocación: a partir de nivel 3, todos los conjuros pertenecientes a la subescuela de convocación que sean ejecutados por el taumaturgo, verán doblada su duración, como si se les hubiera aplicado la dote Prolongar conjuro, aunque el nivel de dichos sortilegios no cambiará. Esta aptitud se apila con el efecto de la dote mencionada (que sí modifica el nivel de los conjuros).

Conjuración contingente: un taumaturgo de 4º nivel es capaz de preparar conjuros de convocación o llamada con antelación para que tengan efecto en un momento determinado. Esto funciona tal y como se describe en el conjuro de contingencia, incluyendo el hecho de que el personaje debe lanzar el sortilegio de antemano. El conjuro se ejecutará instantáneamente cuando tenga lugar la situación desencadenante. Por ejemplo, un taumaturgo podría valerse de esta aptitud para convocar a un diablo punzante la próxima vez que sea atacado, o llamar a un eladrín ghaele para que actúe como mensajero en caso de que el rey caiga enfermo.

Las condiciones requeridas para desatar el efecto del sortilegio deben ser precisas, aunque pueden ser generales. La conjuración contingente puede llegar a fallar al desencadenarse si se formulan unas condiciones complicadas o enrevesadas. El sortilegio de conjuración tendrá lugar basándose solamente en las condiciones estipuladas, independientemente de si el taumaturgo quiere o no, aunque la mayor parte de las conjuraciones pueden deshacerse de la forma habitual. Un taumaturgo no puede tener activa más de una conjuración contingente al mismo tiempo.

Allegado planario: un taumaturgo de 5º nivel puede utilizar cualquiera de los conjuros de aliado de los planos para llamar a un ser que actuará como allegado suyo. La criatura llamada servirá con lealtad y diligencia, siempre y cuando el personaje siga actuando en pro de una causa que sea importante para ella. Por ejemplo, un taumaturgo de 5º nivel podría valerse de aliado de los planos para llamar a un eladrín bralani que actúe como su allegado. Mientras el personaje emprenda misiones y búsquedas para combatir el mal y apoyar la causa del bien, el eladrín le servirá con lealtad. Para llamar a un allegado planario, el taumaturgo debe ejecutar el conjuro adecuado, pagando el coste en PX con normalidad. Para convencer a una criatura con el fin de que sirva como allegado, hace falta una ofrenda de 1.000 po X los DG de dicha criatura y no puede emplearse la aptitud de aliado mejorado, que posee esta clase, para reducir o eliminar este coste. El allegado planario no puede tener más DG que el personaje, y su NEP tampoco puede ser más elevado que el nivel de personaje del taumaturho -2. Un eladrín bralani tiene un NEP de 11 (6 DG y un ajuste de nivel de +5), de modo que podría servir como allegado planario de un clérigo de 8º nivel/taumaturgo de 5º nivel (nivel de personaje 13º).

Un taumaturgo no puede tener más de un allegado planario al mismo tiempo, pero podrá seguir realizando tratos con normalidad con otros seres convocados. Un allegado planario reemplazará a otro normal que ya posea el taumaturgo, si es que tiene alguno gracias a la dote Liderazgo.